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Como sabemos, los últimos años han sido de gran importancia para las empresas a nivel mundial, ya que han surgido nuevas áreas de oportunidad en un entorno que no se consideraban hace 50 años. Por un lado, la pandemia por COVID-19, el cambio climático, los estragos en el medio ambiente y las distintas áreas de cambio en el capital humano.

Conforme a estas situaciones poco a poco se han implementado nuevos sistemas para hacerles frente, gracias a esto, nos hemos adentrado a nuevos territorios en el ámbito laboral. Uno de los más importantes es la sostenibilidad dentro de las empresas.

Hoy es muy común ver diferentes estrategias para implementar este tipo de procesos en las empresas y normalmente las organizaciones que no comienzan a adquirir esta conciencia de cambio se van quedando en clientes e inversionistas. Por esto, la importancia de estos procesos se han hecho mayores con el tiempo y han aumentado el valor de las empresas en la actualidad.

Por estas circunstancias, herramientas como el ESG se han vuelto indispensables en las empresas, ya que ayudan a la gestión de riesgos para el uso correcto de recursos, como plan de reducción de costos y como imán para inversionistas institucionales.

Al involucrarse en temas de medio ambiente y sostenibilidad, las empresas han visto un claro incremento de inversiones en el mercado que se estima podrían alcanzar para finales del 2022 el billón de dólares según encuestas por parte de la organización Climate Bonds y en 2025 podrían alcanzar los 5 billones de dólares. Por lo que la ESG además de propiciar esta entrada económica, es una base fuerte para alcanzar la meta de mejorar el medio ambiente y simboliza una clara actitud de cambio que involucra no solo a la empresa como tal si no que busca generar una cultura organizacional consistente y preocupada por su entorno, algo que sin duda aprecia el capital humano y logra empatizar con sus intereses y preocupaciones individuales.

También recordemos que al capital humano le gusta formar parte de las acciones de cambio dentro de la organización, por lo que el apoyo al medio ambiente fortalece mucho al sentido de identidad de los trabajadores al saber que están realizando algo positivo por el planeta desde el lugar en el que trabajan.

La sostenibilidad como ya hemos mencionado, es sin duda uno de los nuevos retos a los que se enfrentan las organizaciones, pero a su vez se está trasformando en un pilar que en el futuro será imprescindible, así como los cambios en las distintas áreas a raíz de la pandemia, como el trabajo remoto o lo que hoy llamamos “vuelta a la normalidad”, estos son nuevos escenarios que se van integrado a una cultura organizacional definida desde hace años, por lo que es normal ir teniendo ajustes o ir experimentando con estas nuevas modalidades, pero los resultados nos han demostrado que vamos por un buen camino y que adaptarse a estos cambios simbolizan un futuro próspero y de crecimiento constante.

A continuación, compartiremos algunos aspectos a considerar, para lograr implementar la sostenibilidad en la organización de forma funcional.

En este proceso de implementación podemos trabajar con varios aspectos en la primera fase, por ejemplo: Elaborar un análisis de materialidad, definir objetivos y metas estratégicas, y finalmente ejecutar el plan de desarrollo. Es importante que la organización lleve a cabo esta primera parte del proceso ya que sus necesidades pueden ser diferentes a los de otras organizaciones, por lo que es esencial la especialización dependiendo del giro y su enfoque.

Una vez teniendo estos aspectos bien definidos y estar ejerciendo el plan de acción, el enfoque pasa completamente al talento humano, ya que es el factor de mayor importancia en todo el proceso. Durante esta reestructuración podrán darse cambios en los propósitos de la empresa o bien en la percepción de áreas e ideologías, aquí es cuando el talento humano debe incluirse en el proceso de reestructuración para crear en conjunto una nueva cultura organizacional en la empresa.

Los colaboradores al formar parte de este proceso se identifican con las nuevas ideologías y se vuelven parte de su día a día, a su vez el constante trabajo en equipo permite abarcar una ideología unánime y genera un mayor índice en la participación activa, lo que beneficia al trabajador a ser escuchado por la organización para prevenir la rotación de personal.

Por otro lado, la creación de modelos de negocio impulsados por la misión con enfoque a la sostenibilidad será un factor muy importante a considerar, ya que al involucrar al talento humano e ir redefiniendo a la organización abre una puerta para alcanzar una evolución en el modelo de negocio que permite mejorar el desarrollo de la organización y generar un valor adquisitivo mayor cumpliendo con las expectativas más altas de posibles inversionistas o bien de toda la empresa.

Tomando en cuenta otras áreas en las que beneficia ampliamente la sostenibilidad, nos encontramos con la reducción de la huella ecológica como empresa, propuestas como el movimiento B Corp nos muestran no solo el beneficio económico para las empresas preocupadas por la implementación del cuidado al medio ambiente, sino que también nos muestran una responsabilidad social compartida por más de 4,400 empresas dentro de este programa. Además de la implementación de procesos más adecuados dependiendo del giro de las empresas para hacerle frente a los residuos generados por las mismas organizaciones, hasta llegar a la correcta distribución y uso de los recursos.

Y finalmente llegamos a uno de los aspectos más importantes a considerar, liderar la sostenibilidad. Sumándose a iniciativas globales y/o locales; realizar esta acción va a permitir a toda la organización medir sus avances y continuar mejorando sus procesos de sostenibilidad, además de que este tipo de acciones permite una retroalimentación conjunta para cada área y permite seguir trabajando de la mano del talento humano, además de crear alianzas a favor del cambio.

La sostenibilidad genera un gran valor agregado a las organizaciones del futuro, por lo que capacitarse e integrarse a estas estrategias nos permiten seguir conduciéndonos a un camino de éxito en más de un aspecto dentro de las organizaciones, no olvidemos que los escenarios a los que nos enfrentamos actualmente vuelven a la sostenibilidad un requisito para seguir creciendo y mejorar las organizaciones, por lo que este tipo de cambios nos encaminan a un futuro de éxito.